El último protagonista del homicidio es atrapado antes de que escapara. El caso llega al final y después de las felicitaciones del jefe de policía la inspectora Rivera no pierde tiempo para hablarle al comisario de frente.

El comisario y su equipo han entrado por fin en la recta final de la investigación. Es el momento de descubrir cómo ocurrió el crimen.

En medio de la frustración del caso, la inspectora Rivera abre una nueva puerta en la investigación que bien podría ser la clave para coger al asesino de la víctima.

El comisario recibe un importante resultado de la policía científica y esta vez el posterior interrogatorio le dará importantes pistas para la investigación.

Mientras que los sospechosos se van eliminando poco a poco, el comisario decide investigar más detalles sobe el marido de la víctima.

Los policías de la comisaría han hecho un descubrimiento que conduce a un interrogatorio donde saldrán al descubierto muchas cosas interesantes.

Mientras Manara lleva a cabo su propia investigación personal con el jefe de policía, la inspectora Rivera descubre detalles de la vida del comisario. Un interrogatorio posterior también le revelará al marido de la víctima detalles desconocidos sobre su mujer.

El comisario tiene una conversación con la tía de Lara antes de regresar a la oficina para seguir con la investigación.

Después de la autopsia de Ginevra y las investigaciones de Toscani salen más pistas que el comisario decide seguir junto a la nueva inspectora.

La investigación está en pleno vuelo y después de interrogar al marido de la víctima, Luca y su equipo comienzan a tejer las primeras teorías.

Toscani comparte información con Manara mientras que la nueva inspectora tiene un recibimiento que va desde muy cálido hasta muy frío.

Después de entrevistar a los vecinos de su barrio, el comisario se dirige donde el jefe de policía para conocer al sustituto de la inspectora Rubino.

Cuando un nuevo homicidio se desvela en el pueblo, el equipo del comisario Manara no logra disimular las primeras sospechas por muy descabelladas que parezcan.

Ada le lleva un café a la chica que acaba de llegar a su establecimiento pero se encuentra con una gran sorpresa cuando entra en la habitación.

Llega el día del gran adiós y el comisario no puede ocultar sus sentimientos. Sin embargo, el comisario tiene poco tiempo para digerir su tristeza con la llegada del último autobús al pueblo.